Siete mil españoles dejaron su vida en Mathausen. Paco Aura, fiel al juramento que realizaron los supervivientes, según el cual no permitirían que su historia cayese en el olvido, da una conferencia ante un auditorio abarrotado. A partir de sus recuerdos se narra las penalidades de los republicanos españoles: el paso por la frontera, los campos de refugiados, la línea Maginot, la huida a Suiza… pero nada, ni siquiera estar curtido en el campo de batalla, le había preparado para lo que iba a venir: Mathausen. Allí los prisioneros entonan una canción, teñida de nostalgia y esperanza. Su título: «Esperaré siempre tu regreso».